Fernando Medina, el nuevo ministro de Finanzas de Portugal, dijo el viernes que se gravarán las criptomonedas. Esta es una decisión diametralmente opuesta a la imagen que hasta ahora transmite el país en el universo blockchain.
Portugal finalmente gravará las criptomonedas
Fernando Medina, el ministro de Finanzas de Portugal que asumió el cargo el 30 de marzo, anunció ante el Parlamento el viernes que el país gravaría las criptomonedas.
Hasta la fecha, no hay un cronograma para esta nueva medida. Ni siquiera cifras precisas, pero Mendonça Mendes, el Secretario de Estado de Asuntos Fiscales, dio algunas respuestas sobre lo que se implementará en plaza. No solo se gravarán las ganancias, sino que se podrían aplicar otros gravámenes como el IVA o el “impuesto de timbre”, relativo a determinadas transacciones financieras.
Una decisión contraria a la situación actual
Hasta la fecha, las personas que residen en Portugal no están sujetas al impuesto sobre las ganancias con respecto a las criptomonedas. Lo que le dio al país un estatus de visión de futuro. Solo a las empresas del sector se les deducía del 28 al 35% de sus ganancias de capital.
Todo esto ahora está destinado a cambiar y algunos parlamentarios también quieren un cambio profundo. Mariana Mortágua, diputada del Bloque de Izquierda, en efecto, ha comentado la posición actual del país frente a los criptoactivos de una manera poco informada sobre el tema, comparando varios escenarios muy distintos:
“Es increíble cómo el PS se niega a gravar las fortunas creadas en segundos en Internet mientras mantiene el IVA a la electricidad y no aumenta el salario mínimo en un contexto de inflación”.
Ante esta salida, Fernando Medina quiso moderar la situación y más bien parece querer seguir lo que ya se hace en otros países :
“Estamos evaluando regulación en esta materia. Tanto en la lucha contra el lavado de dinero como en la regulación de mercados. Para presentar una iniciativa legislativa que realmente sirva a un país en todos los aspectos, no que abarque ‘periódicos'”.
Mientras que la semana pasada, Alemania anunció que estaba adoptando el razonamiento opuesto por las criptomonedas de calificación cero mantenidas durante más de un año, Portugal parece, desde el punto de vista de nuestro ecosistema, hacer un cambio que no es muy amigable con las criptomonedas.